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Estados Unidos y Corea del Sur actualizaron este lunes un acuerdo de seguridad bilateral con el objetivo de contrarrestar de manera más efectiva las crecientes amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte.
El esfuerzo tuvo lugar tras conversaciones militares de alto nivel en Seúl, donde los aliados también discutieron mejorar los ejercicios de defensa tripartitos con Japón y el intercambio de información sobre los lanzamientos de misiles de Corea del Norte.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, estuvo en Seúl para las conversaciones anuales de seguridad con oficiales militares de Corea del Sur, incluido el ministro de Defensa Shin Won-sik, que se centraron en impulsar la disuasión nuclear contra Corea del Norte.
También hablaron sobre cómo los aliados podrían coordinarse en cuestiones geopolíticas más amplias, como la guerra de Rusia contra Ucrania y el empuje regional de China, dijo Austin.
Las tensiones entre las dos Corea están en su punto más alto en años a medida que el ritmo de las pruebas de armas de Corea del Norte y los ejercicios militares combinados de Corea del Sur con Estados Unidos se han intensificado en un ciclo de reafirmaciones mutuas.
Durante su Reunión Consultiva de Seguridad, Austin y Shin firmaron una nueva versión del acuerdo de Estrategia de Disuasión Adaptada de sus países, que fue revisado por primera vez en una década para abordar la creciente amenaza del programa nuclear militar de Corea del Norte.
Shin dijo que el nuevo documento especifica que EEUU movilizaría toda su gama de capacidades militares, incluidas las nucleares, para defender al Sur en caso de un ataque nuclear de Corea del Norte.
También dijo que el documento proporcionará un modelo para que los aliados elaboren estrategias sobre cómo Corea del Sur podría ayudar a las operaciones nucleares estadounidenses en tales eventos con sus capacidades convencionales, pero no dio más detalles.
«Nuestro compromiso de disuasión con la República de Corea sigue siendo férreo; eso incluye una gama completa de nuestras capacidades de defensa nuclear, convencional y de misiles», dijo Austin en una conferencia de prensa.
Austin explicó que los despliegues estadounidenses de importantes activos militares en Corea del Sur en los últimos meses, que incluyeron un submarino con misiles balísticos nucleares, un bombardero B-52 con capacidad nuclear y portaaviones, demostraban el compromiso de Estados Unidos con la defensa del Sur. Agregó que otro grupo de batalla de portaaviones estadounidenses viajará pronto a la región en una nueva demostración de fuerza.
Shin declaró que los aliados, después de llevar a cabo su mayor entrenamiento con fuego real este año, continuarán ampliando sus ejercicios militares combinados para disuadir y responder a las amenazas de Corea del Norte.
Al llegar a Corea del Sur durante el fin de semana, Austin se reunió anteriormente con Shin durante una reunión tripartita con el ministro de Defensa japonés, Minoru Kihara, quien participó en las conversaciones a través de un video en línea.
Acordaron iniciar, según lo previsto, un acuerdo para compartir información en tiempo real sobre los lanzamientos de misiles norcoreanos en diciembre. Además, establecer planes plurianuales en las próximas semanas para mejorar sus ejercicios militares trilaterales, dijo el Ministerio de Defensa de Corea del Sur.
Austin también se reunió el domingo con Yoon, quien expresó su satisfacción por el aumento de las consultas con Washington sobre los planes de disuasión nuclear y el despliegue más frecuente de activos militares estadounidenses avanzados en la Península de Corea en los últimos meses.
Yoon también subrayó que los aliados deben estar preparados para cualquier tipo de provocación por parte del Norte, incluido un «ataque sorpresa al estilo Hamás», e insistió en que Corea del Norte está implicada «directa e indirectamente» en la guerra de Rusia contra Ucrania y en los enfrentamientos entre Israel y Hamás, según su oficina.
Funcionarios estadounidenses y surcoreanos han acusado a Corea del Norte de proporcionar municiones y equipo militar a Rusia para ayudar a impulsar su guerra en Ucrania.
Funcionarios surcoreanos han dicho que Hamás podría haber utilizado granadas propulsadas por cohetes y otras armas fabricadas en Corea del Norte durante su asalto del 7 de octubre a Israel y que el Norte podría estar considerando vender armas a grupos militantes en el Oriente Medio.
El ataque sorpresa a Israel por parte de Hamas ha generado preocupación en Corea del Sur sobre la posibilidad de un ataque similar por parte de Corea del Norte y llevó al gobierno de Yoon a discutir abiertamente la suspensión de un acuerdo militar intercoreano de 2018 para reducir las tensiones fronterizas y fortalecer la vigilancia de primera línea en el norte.
Sin dar más detalles, Austin dijo que discutió el acuerdo intercoreano con Shin y que los aliados «permanecerán en estrecha consulta» sobre el tema en el futuro.
El martes, Austin y Shin participarán en una reunión ministerial de defensa inaugural entre Corea del Sur y los estados miembros del Comando de las Naciones Unidas liderados por Estados Unidos, que enviaron fuerzas a luchar en nombre del Sur durante la Guerra de Corea de 1950-53.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte criticó este lunes la reunión prevista, calificándola de «plan peligroso para iniciar una nueva guerra de agresión» contra Corea del Norte.
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