«Aquí no hay vida con los apagones», denuncian activistas desde Cuba

Los apagones se recrudecieron durante el fin de semana en la mayoría del territorio nacional cubano, incrementando el malestar social, dijeron a Martí Noticias residentes en los poblados afectados.

El domingo, el Sistema Eléctrico Nacional tuvo un déficit de más de 1.070 megavatios y la empresa estatal Unión Eléctrica de Cuba reconoció que el servicio por el decrecimiento de la capacidad de generación tuvo afectaciones durante las 24 horas.

La falta de fluido eléctrico y de alimentos es la realidad diaria en San Antonio de los Baños, en la provincia de Artemisa, expresó el usufructuario Daniel Alfaro Frías.

“Ponen cinco horas y la quitan cinco horas, anoche mismo la quitaron hasta las 12 y media de la noche y a las cinco de la mañana, ahora la volvieron a quitar otra vez. Y abastecimiento no hay ninguno, hasta hoy, lo que han vendido por la canasta básica son tres libras de arroz por persona”, aseguró.

Guillermo del Sol, comunicador independiente que vive en la ciudad de Santa Clara, en la provincia villareña, advierte que, además de los apagones, predomina allí también el daño en los equipos electrodomésticos por el continuo «quita y pon» de la electricidad.

“El sábado los apagones fueron muy extensos y ayer domingo tuvimos apagón desde por la mañana hasta horas del mediodía, y de noche volvieron nuevamente a quitar el servicio. Muchos equipos se queman y la empresa eléctrica no repone equipos ni indemniza” a los afectados, señaló Del Sol.

En la ciudad de Sancti Spíritus, el periodista independiente Adriano Castañeda dijo que en los municipios es aún peor, y a ello se suma la paralización del transporte estatal intermunicipal por falta de combustible. Apenas el 10% del parque de vehículos para el transporte está operando.

“Constantes apagones que oscilan entre 12 y 14 horas en el día… el pueblo está muy indignado con eso”, aseguró Castañeda.

Desde la ciudad de Holguín, el traumatólogo Ramón Zamora apuntó que, a causa de la actual crisis con la falta de electricidad, las afectaciones ya alcanzan hasta los centros de salud; unos que no tienen plantas eléctricas de emergencia, y otros por falta de combustible o roturas.

“Altamente compleja aquí la situación que estamos viviendo con los excesos de apagones, y acá todo el mundo bien molesto”, aseguró Zamora.

Yoanny Beltrán Gamboa, residente en la ciudad de Guantánamo, e xplicó que allí sólo han vendido, desde el primero de mes, por la canasta básica, tres libras de azúcar y de arroz.

“La corriente se va a cualquier hora, sin límite, 7 u 8 horas; la libra de frijol por la calle, 500 y 550 pesos. Es terrible el problema de la alimentación”, argumentó el activista.

En Camagüey, el descontento es generalizado por los apagones y la falta de alimentos, aseguró Leydis Tabares.

“Cuatro horas, ese es el tiempo en que tenemos corriente. La ponen a la una de la tarde y la quitan a las cuatro, y la vuelven a poner ya tarde en la noche. Aquí no hay vida con los apagones, no hay vida con la comida. La población está sumamente disgustada”, dijo Tabares.

Han sido muy prolongados en los últimos días los apagones en la ciudad de Pinar del Río, y en los municipios de esa provincia, explicó José Rolando Cásares.

“El tema energético para Pinar del Río fue bastante fatal, incluso, hubo más de 14 horas (de apagones) en algunos lugares. En San Juan y Martínez no hubo apagones”, reportó Cásares.

Mientras, la residente en Guaro, en el municipio holguinero de Mayarí, Teresa Miranda Céspedes, expresó la desesperación que viven los habitantes de esa localidad del Oriente de Cuba.

“Esto es terrible, aquí se la llevaron por la tarde hasta los 12 de la noche, pero durante el día hay apagones también. La gente está peleando, la gente está protestando. No hay comida, y sin tener con qué cocinarla, peor todavía. Esto da lástima, Cuba no es un país ya, y esta gente que está en el poder no tiene vergüenza», concluyó.