Un cruce fronterizo de Texas fue cerrado el lunes a los vehículos mientras que en la frontera de Arizona se limitó el tránsito en otro paso con el fin de canalizar más recursos al control de los ingresos ilegales, informaron autoridades federales de Estados Unidos, el indicio más reciente de cómo los veloces cambios en las rutas migratorias le dificultan al gobierno el regular el ingreso de personas.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus iniciales en inglés) anunció el cierre de uno de los dos puentes vehiculares en Eagle Pass, Texas, una localidad de unos 30.000 habitantes que, durante cierto tiempo el año pasado, se convirtió en el corredor con más cruces ilegales. La agencia también redujo el ingreso de vehículos en Lukeville, Arizona, un remoto cruce fronterizo en el desierto que se ha convertido en una importante ruta migratoria en los últimos meses.
“Estados Unidos continúa registrando niveles elevados de encuentros con migrantes en la frontera suroeste, impulsados por traficantes que propagan desinformación para aprovecharse de individuos vulnerables y alentar la migración”, señaló la CBP en un comunicado. “A medida que respondemos con recursos adicionales y aplicamos las consecuencias por ingresos ilegales, las tendencias migratorias también cambian».
Lukeville forma parte del sector Tucson de la Patrulla Fronteriza, el cual fue por mucho el de mayor actividad en octubre entre los nueve sectores que se ubican a lo largo de la frontera con México.
John Modlin, jefe del sector, dijo el domingo que la actividad de todas las cuentas de redes sociales del sector se reduciría temporalmente en respuesta al “actual incremento migratorio”.
“En este momento, se requiere de todo el personal disponible para abordar esta oleada sin precedentes”, escribió Modlin en la plataforma X, anteriormente Twitter. “El equipo de redes sociales volverá una vez que la situación lo permita”.
Poco después reapareció en la plataforma para disculparse por el “comunicado escrito a toda prisa” y prometió un proceso transparente.
Los recortes de personal para atender el comercio y los traslados legales son la respuesta más reciente a las exigencias de procesar a las personas que cruzan ilegalmente la frontera, a menudo para pedir asilo. Un importante cruce peatonal en San Diego estuvo cerrado durante varias semanas a partir de septiembre mientras las autoridades ponían más atención a las personas que ingresaban sin permiso al país.
Aunque los arrestos por ingresos ilegales cayeron durante octubre, septiembre fue el segundo mes con mayor cantidad de detenciones del que se tenga registro.