El gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) iniciaron el lunes en la Ciudad de México el quinto ciclo de diálogos de paz bajo las presiones que generó semanas atrás el secuestro de los padres de la estrella del fútbol colombiano, Luis Díaz, que desató una crisis en el proceso.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México anunció el lunes en un comunicado el arranque formal de las conversaciones que se dan después de que ambas partes tuvieran acercamientos desde el 30 de noviembre en medio de fuerte hermetismo.
México dijo que espera que en esta nueva ronda de negociaciones se abran «vías para alcanzar una solución definitiva y duradera del conflicto”.
En esta ronda los representantes de ambas partes tienen previsto concentrar esfuerzos en superar la crisis en la que entraron los diálogos luego del secuestro de los padres de Díaz, futbolista de la selección colombiana y del club inglés Liverpool, según informó el mes pasado la delegación de paz del gobierno de Gustavo Petro.
Tras ese hecho el gobierno de Petro elevó las presiones para que la guerrilla cesara los secuestros y liberara a las personas que aún mantiene en su poder, lo que generó tensiones entre las partes.
En un mensaje en la red social X, antes Twitter, el ELN dijo que su delegación “está dispuesta” a avanzar en los diálogos de paz. El comunicado del gobierno mexicano fue difundido primero por el ELN y horas después por la Cancillería de México.
Durante el quinto ciclo de conversaciones, también es posible que se aborde el primer informe trimestral sobre el cese bilateral del fuego por 180 días que se inició el 3 de agosto.
La crisis surgió tras casi un año de conversaciones de paz que se iniciaron formalmente en noviembre del 2022 después de más de tres años de suspensión. En los últimos meses, las partes han sostenido reuniones en Caracas, Ciudad de México y La Habana.
En el proceso están participando Brasil, México, Chile, Cuba, Noruega y Venezuela como “países garantes” y como acompañantes, el representante especial del secretario general de las Naciones Unidas en Colombia, la Conferencia Episcopal de Colombia, así como delegados de Alemania, España Suecia y Suiza que conforman el Grupo de Acompañamiento, Apoyo y Cooperación (GPAAC), precisó la Cancillería mexicana.
El reinicio de las conversaciones fue celebrado por el representante de la ONU, Carlos Ruiz, y por el canciller cubano, Bruno Rodríguez, quien reiteró la disposición de La Habana para seguir apoyando el proceso.
El ELN secuestró el 28 de octubre a Luis Manuel Díaz Jiménez y Cilenis Marulanda, padres de Díaz, en La Guajira. Maluranda fue liberada horas después, pero Díaz Jiménez estuvo 12 días en cautiverio en las inmediaciones de la Sierra de Perijá, donde por años se ha reportado la presencia del grupo guerrillero. Fue liberado el 9 de noviembre.
De acuerdo con datos de las autoridades, el ELN ha secuestrado este año una treintena de personas con fines de extorsión y al menos cuatro permanecen en poder del grupo guerrillero.
Medios colombianos publicaron la semana pasada un par de cartas en las que el ELN anunció que no cumpliría “este o cualquier ultimátum que se le quiera imponer de manera unilateral por la contraparte”.
El secuestro es uno de los crímenes más rechazados en Colombia y la decisión del ELN de mantener esa actividad ilegal como parte de sus fuentes de financiamiento ha generado críticas en ese país.
Desde Colombia, el senador opositor David Luna exigió el lunes a Petro que no se siente en la mesa de diálogo con el ELN hasta que libere a todos los secuestrados que tiene en su poder.
El ministro de Defensa de Colombia, Iván Velásquez, cuestionó recientemente el “compromiso real” del ELN para buscar la paz, cuando “resulta incomprensible” que anunciaran un paro armado al tiempo que las delegaciones se desplazaban a México.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo colombiana exhortó al grupo guerrillero a dejar de reclutar forzadamente menores de edad para engrosar sus filas, abandonar el secuestro y levantar un paro armado —restricción a la movilidad bajo amenazas— en poblaciones del Chocó, al oeste de Colombia.
El ELN fue fundado en 1964 bajo la influencia de la revolución cubana y desde entonces ha intentado negociar la paz con el Estado colombiano en cinco ocasiones sin éxito. La guerrilla tiene presencia en más de 200 municipios de Colombia, con una estructura de bloques que responden a un comando central.