Cuba cierra más de mil establecimientos e impone multas por violaciones

Las autoridades cubanas cerraron 1.118 establecimientos vinculados a la red minorista del Comercio Interior, según dio a conocer este jueves la ministra del sector, Betsy Díaz Velázquez ante la Asamblea Nacional del Poder Popular.

La funcionaria también informó sobre el retiro de 509 autorizaciones comerciales y la imposición de 2.032 multas como parte de un grupo de acciones de control entre enero y mayo.

El proceso de fiscalización a entidades productoras vinculadas al comercio minorista derivó en la cancelación de 588 autorizaciones comerciales, dijo la ministra.

“No se ha logrado el efecto esperado de reorientar las producciones nacionales a la red de comercio minorista estatal”, dijo en declaraciones reproducidas por el portal digital Cubadebate.

En los controles realizados, tanto en el sector estatal como en el no estatal, se encontraron deficiencias entres las que resaltaron la violación de los tiempos de garantía de los equipos que se venden, la comercialización de productos vencidos, la no implementación o negación del uso del pago electrónico y la falta de preparación del personal sobre la protección al consumidor y el incumplimiento de los derechos de los consumidores.

La ministra criticó el estado de la gastronomía y los servicios, donde predominan “la chapucería y los malos tratos al cliente”.

Sobre la distribución de los alimentos de la canasta familiar normada, señaló que hay «problemas» en la cadena de distribución y en los almacenes mayoristas, con notables retrasos en la entrega de arroz, frijol, azúcar, café, cigarro, pastas alimenticias y leche en polvo, sin ofrecer detalles.

También reconoció que persisten los robos en las bodegas.

La ministra culpó al embargo estadounidense por el mal funcionamiento del sector. En ese sentido, dijo que “el recrudecimiento del bloqueo” es el principal agravante de la crisis económica nacional y que repercute directamente en el mal estado de los servicios a la población.

Economistas consultados dijeron que el panorama económico en Cuba es desolador y que, después de lo visto en las sesiones del Parlamento, que han dejado al descubierto la grave crisis económica que atraviesa el país, se puede esperar un empeoramiento de la situación.

En el centro de los debates en la Asamblea estuvieron la escasez, el desabastecimiento y la inflación.

El desabastecimiento de alimentos y los atrasos en las entregas de los productos racionados son problemas de larga data en la isla que el Gobierno continúa sin resolver. Los retrasos en 2024 han oscilado entre 40 y 105 días.