La triste imagen de una perrita que sigue esperando a su dueño que murió ahogado al cruzar un río congelado

En la república rusa de Bashkiria, una perrita apodada Belka permanece en el lugar donde su dueño perdió la vida. La leal del animal conmovió en redes sociales y a la comunidad.

Su amo, un hombre de 59 años, murió ahogado mientras intentaba cruzar el río Ufá en bicicleta sobre una delgada capa de hielo. El accidente ocurrió el pasado 24 de noviembre y, desde entonces, Belka no se ha apartado del lugar, esperando con esperanzas imposibles el regreso de su dueño.

Regresa todos los días

Las autoridades locales informaron que Belka lleva cuatro días regresando al hielo, a pesar de los esfuerzos de los rescatistas y familiares por llevarla a un lugar seguro.

«La perra continuaba esperando a su amo. Regresaba al hielo y los rescatistas la llevaban de nuevo a la orilla, pero Belka volvía a salir al hielo», explicó Kiril Pervov, presidente en funciones de Emergencias de Bashkiria, a través de un comunicado en Telegram, lugar en el que también compartió imágenes y videos del emotivo momento.

Una despedida marcada por la tragedia

El accidente ocurrió cuando el hombre intentaba recortar el camino a casa cruzando el río Ufá, él ignoró el peligro que representaba una capa de hielo de apenas dos centímetros de espesor. Durante la búsqueda, los rescatistas localizaron primero la bicicleta a una profundidad de siete metros. No fue sino hasta el 27 de noviembre cuando encontraron el cuerpo del hombre a nueve metros de profundidad y lograron recuperarlo. 

Pervov utilizó esta oportunidad para advertir sobre los riesgos de aventurarse sobre ríos congelados sin tomar las precauciones necesarias. “Llamamos a los habitantes de Bashkiria a no poner sus vidas en peligro”, señaló e instó a la comunidad a evitar situaciones similares.Belka: un símbolo de fidelidad

El nombre de Belka, que significa «Ardillita», recuerda a uno de los perros que marcaron un hito histórico al viajar al espacio en 1960 a bordo del Sputnik-5. Hoy, ese nombre cobra un nuevo significado, asociándose con la devoción y la espera incansable de este animal por su dueño.

A pesar de los intentos de los familiares de llevársela a casa, la perra sigue regresando al lugar del trágico incidente. «Pese a los intentos de los familiares de llevarla a casa, el fiel amigo no pierde las esperanzas de reencontrarse con su amo», agregó Pervov, resaltando la conexión inquebrantable entre el hombre y su mascota.

La imagen de Belka sobre el hielo no solo es un testimonio de la lealtad animal, sino también un recordatorio del amor que los animales sienten por quienes los cuidan, incluso cuando ya no están.

EFE