Israel lanzó una nueva andanada de ataques aéreos el lunes contra Gaza mientras prometía acabar con el control militante de Hamás en ese territorio ubicado a orillas del Mar Mediterráneo.
Con 300.000 soldados israelíes estacionados en la frontera de Gaza y preparados para una invasión terrestre, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, dijo al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, de visita en el país: “Esta será una guerra larga. El precio será alto, pero vamos a ganar para Israel, para el pueblo judío y para los valores en los que ambos países creen”.
El máximo diplomático estadounidense aseguró a Gallant que podía seguir contando con el apoyo estadounidense.
“Ustedes conocen nuestro profundo compromiso con el derecho de Israel, de hecho su obligación, de defenderse y defender a su pueblo”, explicó Blinken.
Una crisis a las puertas
Pero como se estima que 500.000 palestinos han cumplido las órdenes israelíes de huir del norte de la Franja de Gaza hacia la mitad sur del lugar, una crisis humanitaria se está apoderando rápidamente del territorio, con Israel bloqueando la entrega de alimentos y nuevos suministros de combustible, incluso cuando reabrió una tubería de agua en el sur.
Camiones llenos de bienes humanitarios están bloqueados en el cruce fronterizo de Rafah entre Gaza y Egipto, mientras las Naciones Unidas advierten de una situación terrible. Los palestinos dijeron que se están quedando rápidamente sin alimentos, con largas filas de varias horas en las panaderías.
«He estado esperando 10 horas para conseguir pan, y por supuesto, esta cantidad no es suficiente», dijo Ahmad Salah en Deir al-Balah, donde agregó que tenía que alimentar a entre 20 y 30 miembros de su familia. «Este es un sufrimiento doloroso para nosotros».
Visita de Biden
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, viajará el miércoles a Israel y ese mismo día se desplazará a Jordania, donde será recibidó por el rey Abdullah y se reunirá con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, informó el lunes el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
El representante del gobierno estadounidense realizó el anuncio tras reunirse, en Tel Aviv, con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Biden ya había expresado su apoyo a la respuesta de Israel a Hamás, diciendo en una entrevista a la cadena estadounidense CBS, transmitida el domingo por la noche, que Israel “está persiguiendo a un grupo de personas que se han involucrado en una barbarie que es tan trascendental como el Holocausto”.
Biden comentó que Israel haría “todo lo que esté a su alcance para evitar la matanza de civiles inocentes”. También dijo que sería “un gran error” si Israel ocupara la Franja de Gaza.
Por su parte, el Departamento de Estado informó el lunes que cerca de mil ciudadanos estadounidenses habían dejado Israel junto a sus familiares, según un portavoz citado por Reuters.
A la fecha Estado ha brindado la facilidad de unas 4.000 capacidades en aviones para salir de Israel por medio de vuelos chárter y vía marítimas, aunque sólo poco menos de la mitad ha sido utilizada.
Se espera que los vuelos para los estadounidenses, en coordinación con el gobierno de Tel Aviv, estén disponibles hasta el jueves.
Ayuda internacional
Petroleros con banderas de las Naciones Unidas han cruzado a Egipto desde Gaza para recoger suministros de combustible para el enclave asediado.
Blinken, que regresó a Israel el lunes después de visitar varios países árabes de la región, dijo que Estados Unidos estaba trabajando con Egipto, Israel y las Naciones Unidas para garantizar que la ayuda pueda ingresar a Gaza y así llegar a los necesitados.
“En los últimos días, viajé a Israel, Jordania, Bahrein, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Egipto”, enumeró Blinken el lunes en la red social X. «Lo que he escuchado de todos los socios es una visión compartida de evitar que el conflicto se extienda, salvaguardar vidas inocentes y hacer llegar asistencia a quienes la necesitan en Gaza».
Más tarde el lunes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, habló de las gestiones del gobierno regional para echar una mano a los esfuerzos por asistir a los necesitados.
“Además de triplicar la ayuda humanitaria para los civiles en Gaza, estamos organizando un puente aéreo humanitario de la UE hacia Gaza a través de Egipto”, señaló, en un mensaje en X y en el que remitió a una declaración de prensa.
Von der Leyen inistió en que “Los palestinos en Gaza necesitan ayuda humanitaria. No pueden pagar el precio de la barbarie de Hamás”, al tiempo que adelantó que los dos primeros vuelos con asistencia partirán esta semana hacia la zona de conflicto.
Rehenes: prioridad israelí
Mientras tanto, el número de muertos derivados del ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre y los contraataques de represalia de Israel contra Gaza está aumentando. El Ministerio de Salud de Gaza dijo que 2.750 palestinos han muerto y 9.700 han resultado heridos.
Según Israel, más de 1.400 israelíes resultaron asesinados y al menos otros 199, incluidos niños, fueron capturados por Hamás y llevados como rehenes a Gaza.
Este lunes el portavoz del brazo armado del grupo dijo en un video grabado que Hamás tiene entre 200 y 250 israelíes cautivos en Gaza, informó Reuters.
«Los esfuerzos por los rehenes son una máxima prioridad nacional», afirmó el portavoz militar, el contraalmirante Daniel Hagari. «El ejército e Israel están trabajando día y noche para traerlos de regreso».
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha pedido a Hamás que libere inmediatamente a los rehenes sin condiciones. También instó a Israel a permitir el acceso sin obstáculos de suministros humanitarios y trabajadores a Gaza.
“Cada uno de estos dos objetivos son válidos en sí mismos. No deberían convertirse en moneda de cambio”, dijo Guterres en un comunicado el domingo.
Se teme que los combates puedan extenderse a la frontera de Israel con el Líbano, donde el grupo militante Hezbolá, apoyado por Irán, dijo que sus combatientes atacaron cinco puestos israelíes a lo largo de la frontera en el sur del país.
En declaraciones ante la Knesset israelí el lunes, el primer ministro Netanyahu, advirtió a Irán y a Hezbolá: «No nos pongan a prueba en el norte. No cometan el error del pasado. Hoy, el precio que pagarán será mucho más alto», dijo, refiriéndose a la guerra de Israel contra Hezbolá en 2006.
Tras una serie de ataques transfronterizos en el norte de Israel por parte de militantes de Hezbolá en el Líbano, Israel anunció el lunes la evacuación de residentes de 28 aldeas dentro de dos kilómetros de la frontera.
[Parte de la información para este artículo provino de The Associated Press, Agence France-Presse y Reuters].