Las autoridades sanitarias de la Franja de Gaza, controlada por Hamás, dijeron que un ataque aéreo israelí contra un campo de refugiados en el centro de Gaza el domingo por la noche mató al menos a 70 personas.
El ejército israelí dijo que estaba revisando el ataque reportado en Maghazi, al tiempo que reiteró su compromiso de minimizar el daño a los civiles en su guerra para eliminar al grupo militante Hamás.
Israel también reportó varias muertes más entre sus soldados, lo que elevó el número de muertos desde el viernes a 17 y el número total de soldados israelíes muertos desde el lanzamiento de su operación terrestre en Gaza a 156.
La ofensiva israelí, que ha incluido miles de ataques aéreos además de operaciones terrestres, ha dejado vastas partes de Gaza en ruinas y ha matado a 20.400 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Los combates también han desplazado a la mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza, y muchos tratan de encontrar seguridad en refugios superpoblados administrados por la ONU en el sur de Gaza.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió el domingo continuar lo que dijo sería una «guerra larga» hasta que las fuerzas israelíes eliminen a Hamás y restauren la seguridad.
En una solemne misa de Nochebuena en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, el papa Francisco lamentó que el mensaje de paz de Jesús esté siendo ahogado por la «lógica inútil de la guerra» en la tierra donde nació.
«Esta noche, nuestros corazones están en Belén, donde el Príncipe de la Paz es rechazado una vez más por la lógica fútil de la guerra, por el choque de armas que aún hoy le impide encontrar espacio en el mundo», dijo el papa Francisco mientras el número de muertos sigue aumentando en Gaza.
El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo el domingo que el sistema de salud en Gaza estaba siendo destruido y reiteró su llamado a un alto el fuego.
«La destrucción del sistema de salud de Gaza es una tragedia», publicó en X, anteriormente Twitter. «Persistimos en pedir #CeasefireNow».
Hasta el 20 de diciembre, la OMS había registrado 246 ataques contra la atención médica en Gaza, incluidos hospitales y ambulancias, que causaron 582 muertos y 748 heridos.
Militantes de Hamás irrumpieron en la frontera de Gaza el 7 de octubre y atacaron comunidades del sur de Israel, matando a unas 1.200 personas, según Israel. El grupo, designado como grupo terrorista por Estados Unidos y otros países, también capturó a unos 240 rehenes, de los cuales 129 permanecen en Gaza.
En respuesta, Israel prometió aplastar a Hamás y lanzó una ofensiva aérea, terrestre y marítima contra Gaza.
Israel dijo que Hamás es el culpable del alto número de civiles muertos, citando su uso de áreas residenciales y túneles abarrotados.
[Parte del material para este informe provino de The Associated Press, Agence France-Presse y Reuters]
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