Condena internacional tras irrupción policial en la Embajada de México en Ecuador
Gobiernos y altos funcionarios internacionales condenaron la decisión de Ecuador de irrumpir en la embajada de México para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas, a quien se le había concedido asilo político en la misión diplomática.
La redada de la policía de Quito para apresar a Glas, refugiado en la embajada mexicana tras ser acusado de corrupción, llevó al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador a romper relaciones con el gobierno de su homólogo Daniel Noboa y a denunciar la acción como una violación de los códigos internacionales.
El allanamiento – defendido por Ecuador como una acción soberana – fue amplia y duramente condenado por países e instituciones del hemisferio.
“Estados Unidos condena cualquier violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y toma muy en serio la obligación de los países anfitriones según el derecho internacional de respetar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas”, insistió el portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Matthew Miller.
Miller también hizo un llamado a ambos países, «socios cruciales» de Washington, a «resolver sus diferencias de acuerdo con el derecho internacional».
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores español dijo en un comunicado el domingo, que “el ingreso por la fuerza a la Embajada de México en Quito constituye una violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961. Hacemos un llamado al respeto al derecho internacional y a la concordia entre México y Ecuador, países hermanos de España y miembros de la comunidad iberoamericana”.
La Organización de Estados Americanos recordó a sus miembros, entre los que se encuentran Ecuador y México, su obligación de no “invocar normas de derecho interno para justificar el incumplimiento de sus obligaciones internacionales” y propuso una reunión de su Consejo Permanente para debatir el incidente.
En una publicación en la red social X, la presidenta hondureña, Xiomara Castro, caracterizó la redada como “un acto intolerable para la comunidad internacional” y una “violación de la soberanía del Estado mexicano y del derecho internacional” porque “ignora el derecho histórico y fundamental al asilo”.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, «está alarmado por el ingreso forzoso de fuerzas de seguridad ecuatorianas a las instalaciones de la Embajada de México en Quito», informó el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, desde Nueva York.
Naciones Unidas «reafirma el principio cardinal de la inviolabilidad de los locales y del personal diplomático y consular». El secretario del bloque destacó que acciones como esta «ponen en peligro la búsqueda de relaciones internacionales normales, que son fundamentales para el avance de la cooperación entre los Estados».
En la región, países de todos los espectros políticos como Brasil, Argentina, Colombia, Chile, Venezuela, Perú, Paraguay, Uruguay y Cuba mostraron su solidaridad con México y rechazaron la actitud de Ecuador.
«La acción constituye una clara violación de la Convención Americana sobre Asilo Diplomático y de la Convención de Viena», indicó un comunicado de la cancillería de Brasil.
El presidente colombiano Gustavo Petro dijo que promoverá una acción para la que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos expida medidas cautelares en favor de Glas.
«La República Argentina se une a los países de la región en la condena a lo sucedido», expresó por su parte el ministerio de Relaciones Exteriores de esa nación.
Cierre de la embajada mexicana y regreso del personal
Las instalaciones diplomáticas en suelo extranjero se consideran “inviolables” según los tratados de Viena, y las agencias encargadas de hacer cumplir la ley del país anfitrión no pueden ingresar sin el permiso del embajador.
Las personas que buscan asilo han vivido desde días hasta años en embajadas de todo el mundo, incluida la de Ecuador en Londres, que albergó al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, durante siete años ante la imposibilidad de la policía británica de entrar para arrestarlo.
Luego del anuncio de ruptura de relaciones, la canciller mexicana Alicia Bárcena informó que la misión diplomática de su país en Quito cerraría indefinidamente, al igual que los servicios consulares.
Anunció que 18 personas viajarán de regreso a México el domingo en un vuelo comercial. «Estamos coordinando el retorno de nuestro personal diplomático acreditado en Ecuador, junto con sus familias», detalló en una comunicación.
La canciller ya había publicado en X que varios diplomáticos sufrieron heridas durante el asalto e insistió en que México llevaría el caso a la Corte Internacional de Justicia “para denunciar la responsabilidad de Ecuador por violaciones del derecho internacional”.
Glas trasladado a prisión
Tras su arresto, el exvicepresidente Jorge Glas fue trasladado desde la oficina del fiscal general en Quito a la ciudad portuaria de Guayaquil, donde permanecerá detenido en una prisión de máxima seguridad.
Glas, condenado por corrupción, permanecía en la sede diplomática mexicana desde que pidió asilo en diciembre, petición que fue otorgada por México más temprano el viernes.
Sonia Vera, abogada internacional de Glas, dijo a Reuters que su equipo estaba solicitando ayuda ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, así como ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y la Asamblea General.
Este incidente diplomático es el más reciente en una cadena de crecientes tensiones entre México y Ecuador, que el jueves había declarado persona non grata a la embajadora mexicana en Quito, tras comentarios «desafortunados» de López Obrador, quien hizo comentarios sobre las sangrientas elecciones del año pasado en el país suramericano que irritaron al gobierno de esa nación.
Las autoridades ecuatorianas investigan a Glas por supuestas irregularidades durante su gestión, específicamente sobre los esfuerzos de reconstrucción tras un potente terremoto en 2016 que mató a cientos de personas. El exvicepresidente fue declarado culpable de soborno y corrupción en otros casos.
La ministra de Relaciones Exteriores de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, dijo el sábado a periodistas que la decisión de ingresar a la embajada fue tomada por el presidente Daniel Noboa luego de considerar el “inminente riesgo de fuga de Glas” y agotar todas las posibilidades de diálogo diplomático con México.
Sommerfeld destacó que “no es legal conceder asilo a personas condenadas por delitos comunes y por tribunales competentes”.
Noboa se enfrenta a una reelección en 2025 debido a que fue elegido para terminar el mandato del expresidente Guillermo Lasso, quien llamó a elecciones adelantadas.
Poco después de su toma de posesión, en enero pasado el mandatario ecuatoriano declaró al país – en medio de una ola de crimen relacionado con el narcotráfico – en un “conflicto armado interno” y designó a 20 bandas de narcotraficantes como grupos terroristas que los militares tenían autorización para “neutralizar” dentro de los límites del derecho internacional humanitario.
[Con información de Reuters y AP]¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestros canales de YouTube, WhatsApp y al newsletter. Activa las notificaciones y síguenos en Facebook, X e Instagram.