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Legisladores republicanos de la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos iniciaron este miércoles procedimientos para un juicio político para destituir al secretario de Seguridad Nacional de EEUU, Alejandro Mayorkas, por supuesta negligencia, mientras en el Senado transcurre una dura negociación sobre política migratoria con la administración del demócrata Joe Biden.
«Las acciones del secretario nos han traído aquí hoy, no las nuestras», destacó el presidente del Comité de Seguridad Nacional, el republicano Mark Green, quien calificó a Mayorkas como «el arquitecto de la devastación» en la frontera con políticas laxas que, según aseguran, alientan las entradas irregulares de migrantes.
Green comenzó la audiencia afirmando que «no hay otra alternativa razonable que perseguir la posibilidad de un juicio político». El comité ha estado trabajando en la posibilidad de procedimientos para la destitución de Mayorkas desde hace meses.
Mayorkas, quien participa en las conversaciones casi diarias con un grupo bipartito de senadores sobre un paquete que combina fondos para seguridad fronteriza con ayudas para Ucrania e Israel, está acusado de «incumplir con su deber» de manejar el aumento en llegadas de migrantes al límite sur de EEUU con México, que han llegado a 10.000 diarias.
Después de un descenso notable tras la aplicación de políticas como la del parole humanitario para venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos, los encuentros en la fronteras subieron a niveles récord, números que han vuelto a bajar recientemente.
Durante una visita este lunes a la frontera entre Texas y México, Mayorkas pidió al Congreso reformar las leyes de inmigración y proporcionar más fondos para la seguridad fronteriza. «No hay nada que me tome más en serio que nuestra responsabilidad de respetar la ley», insistió.
El secretario de Seguridad Nacional fue invitado a testificar en una segunda audiencia de juicio político prevista para el 18 de enero, pero aún no ha confirmado su asistencia.
Un juicio político a un miembro del gabinete es algo poco común. Sólo existe un antecedente, cuando la Cámara acusó al secretario de Defensa William Belknap en 1876 por sobornos en contratos gubernamentales. Una acusación a un funcionario de alto nivel por motivos políticos, en este caso el manejo del tema migratorio, es algo inédito, según analistas.
«No se puede impugnar a un secretario del gabinete porque no te gustan las políticas de un presidente», dijo el principal demócrata del Comité de Seguridad Naciona, Bennie Thompson.
Thompson aseguró que la evidencia a lo largo de las audiencias mostrará que Mayorkas, de hecho, está haciendo su trabajo. Denunció la disfunción política proveniente de la estrecha mayoría republicana en la Cámara. «Este no es un juicio político legítimo», insistió.
Los republicanos de la Cámara, especialmente el ala de extrema derecha, también persigue un juicio político contra sobre el presidente Joe Biden por los negocios de su hijo Hunter Biden.
[Con información de Reuters y AP]
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