El juez que preside el caso penal contra Donald Trump en Nueva York regañó este martes al expresidente cuando este desestimó audiblemente la explicación de una posible miembro del jurado sobre por qué grabó en video una celebración callejera de su derrota de la reelección en 2020.
El juez de la Corte Suprema del condado de Nueva York, Juan Merchan, reprendió a Trump después de que su abogado defensor, Todd Blanche, intentó sin éxito impedir que la mujer fuera incluida en el jurado porque había publicado el video de la escena de la calle en las redes sociales.
Merchan le dijo a Blanche que le explicara al acusado que no toleraría esa actitud: “No permitiré que ningún jurado sea intimidado en esta sala del tribunal», dijo.
Luego, después de que la posible miembro del jurado abandonó la sala del tribunal, Merchan regañó a Trump por su comportamiento. Merchan dijo que Trump estaba «diciendo algo audiblemente», «haciendo gestos» y «hablando en su dirección».
La mujer le dijo a Merchan que recordaba haber visto gente bailando en la calle cuando el presidente Joe Biden derrotó a Trump y lo describió como un «momento de celebración en la ciudad de Nueva York». La mujer dijo que si formara parte del jurado, no permitiría que el momento de 2020 afectara su juicio.
«Creo muy, muy firmemente que, independientemente de mis pensamientos sobre algo o alguien o de mis sentimientos políticos, el trabajo del jurado es comprender los hechos del juicio y ser juez de los hechos», declaró.
La mujer señaló que el lunes «la gente se fue porque pensaba que no podían» juzgar el caso de manera justa. «No creo eso de mí en absoluto».
El drama judicial se produjo cuando Merchan comenzó a elegir a 12 jurados y seis suplentes para escuchar el primer caso penal contra un expresidente de Estados Unidos.
A última hora de la tarde, se habían seleccionado seis de los 12 jurados.
Trump, el presunto candidato presidencial republicano de 2024 contra Biden en las elecciones del 5 de noviembre, está acusado de conspirar para ocultar pagos de dinero para encubrir supuestas relaciones extramatrimoniales justo antes de su exitosa campaña de 2016 para la Casa Blanca.
En otro desafío al jurado, Merchan se puso del lado del abogado Blanche al desestimar a un posible miembro del jurado que celebró en Facebook que al comienzo de la presidencia de Trump perdió un caso judicial que cuestionaba su prohibición de entrada de musulmanes a los EEUU. El posible miembro del jurado dijo que Trump debería ser encarcelado.
Anteriormente, Merchan despidió a varios posibles miembros del jurado cuando reconocieron que no podían juzgar el caso de manera justa.
Antes de llegar al segundo día del juicio, Trump se quejó sobre Merchan en la plataforma Truth Social, diciendo: «Este conflicto, el juez que odia a Trump no me deja responder a las personas que están en la televisión mintiendo y escupiendo odio todo el día. Está pisoteando a mis abogados y a mi equipo legal».
El sentimiento expresado por los aspirantes a jurado tal vez no sea sorprendente. Biden derrotó a Trump por un margen de 85 % a 15 % en las elecciones de 2020 en Manhattan, el distrito de la ciudad de Nueva York donde se lleva a cabo el juicio, y los nombres de los posibles jurados se extrajeron al azar de la lista de votantes registrados.
Con tanta oposición a Trump en la ciudad donde vivió una vida llena de celebridades y presidió su conglomerado inmobiliario antes de ingresar a la política en 2015, podría llevar días sentar al jurado junto con seis suplentes.
Trump ha atacado habitualmente a Merchan por sus fallos en el caso. Se quejó el lunes de que el jurista no aceptó de inmediato aplazar el caso el 17 de mayo para poder asistir a la graduación de la escuela secundaria de su hijo Barron en la Florida.
Merchan ha preguntado a los neoyorquinos del jurado sobre los medios de comunicación en los que leen o escuchan las noticias del día, su estado civil, si tienen hijos y dónde trabajan.
Merchan tiene cientos de posibles jurados más esperando en el tribunal para ser examinados, si es necesario. El juez tiene una lista de 42 preguntas. Cuando terminó de interrogar a 18 posibles miembros del jurado, los fiscales y los abogados de Trump tomaron su turno.
Los abogados, según el edicto de Merchan, no podían preguntar a los posibles miembros del jurado si votaron a favor o en contra de Trump en sus campañas de 2016 y 2020 o sobre sus registros en partidos políticos.
No obstante, Blanche intentó obtener la opinión de un posible miembro del jurado sobre el 45 presidente del país, pero el hombre se negó varias veces a hablar de ello, diciendo que «no tenía absolutamente ninguna relación con el caso». El aspirante a jurado finalmente dijo que era demócrata, pero no dio más detalles.
El expresidente observa el proceso desde la mesa del acusado, flanqueado por sus abogados, toma algunas notas y ocasionalmente mira a los posibles miembros del jurado. Pareció quedarse dormido en algunos momentos del procedimiento del lunes por la tarde antes de volver a reactivarse.
Con el tiempo, podría subir al estrado de los testigos para defenderse, dependiendo de cómo él y sus abogados vean las pruebas de los fiscales.
Dado que Trump debe comparecer ante el tribunal, es casi seguro que el caso limitará el tiempo de campaña del candidato de 77 años.
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