Sin agua, sin electricidad y sin comida. En casi total oscuridad.
Continúa el bloqueo de la franja de Gaza por parte de Israel como represalia por el ataque de Hamás de la semana pasada. Una situación que las agencias internacionales, como la Cruz Roja, definieron como posiblemente catastrófica.
Fabrizio Carboni del Comité Internacional de la Cruz Roja denunció: «Si no podemos distribuir lo que tenemos dentro de Gaza, vamos hacia una catástrofe, pero ya estamos en la catástrofe, pero aquí vamos mucho más allá y la situación humanitaria se volverá inmanejable».
La única central eléctrica de Gaza cerró el miércoles porque el bloqueo impuesto también por Egipto impide el envío de combustible y en pocas horas los generadores de emergencia en la Franja se podrían quedar sin energía, afectando principalmente a hospitales.
Esto ocurre cuando los ataques aéreos israelíes han matado más de 1400 personas, incluyendo 447 niños, según el ministerio de salud de Gaza. Los médicos describen la situación como sin precedentes.
Mohammad Abu Selmia, director general del Hospital Shifa de Gaza dijo: “No podemos encontrarles camas de hospital, la unidad de cuidados intensivos está llena, hay quirófanos abarrotados. Algunos de los pacientes y heridos podrían convertirse en mártires en cualquier momento, pero no podemos ayudarlos debido a la gran cantidad y la escasez de instalaciones y medicamentos. La situación es muy crítica”.
Según las Naciones Unidas, casi 340.000 personas en Gaza han sido desplazadas por el conflicto. El ministro de energía de Israel dijo que los suministros seguirán bloqueados hasta que se liberen los rehenes.
Jinan Al-Attar, una residente de 14 años en Gaza dijo:
«Cuando me despierto lo primero es que voy a lavarme la cara, pero no hay agua, ni siquiera para ducharme hay agua. Vamos de baño en baño a buscar agua.”
Hamás ha rechazado la propuesta de abrir un corredor humanitario para llevar a los civiles a un lugar seguro en Gaza porque, dijo, que «obligaría al pueblo palestino a abandonar su patria e implicaría un nuevo éxodo y la búsqueda de refugio».